Liposucción tumescente

El primer problema fue la eliminación de electrolitos como el sodio y el potasio, además de la grasa. Todos sabemos, por la sudoración al hacer ejercicio, cómo esto puede afectarnos. Este problema se solucionó en 1985 con el avance del Dr. Jeffrey Klein, la liposucción tumescente. Se infundía una solución salina que aportaba electrolitos adicionales antes de la succión y, además, reducía el sangrado prácticamente a cero. Este fue un gran avance. Permitió que los límites de seguridad de eliminación de grasa, citados por muchos expertos, se elevaran a 5 litros. Esto equivale al tamaño de dos botellas de refresco de dos litros y medio. ¡MUCHA grasa!

Liposucción ultrasónica

Sin embargo, aún quedaba otro problema. Cuando un balón está lleno, queda firme y liso. Al vaciarse, se ondula. Logramos eliminar tanta grasa que la piel a menudo se ondulaba. Se intentó resolver este problema con tecnologías como la liposucción ultrasónica. La liposucción ultrasónica fue algo útil, pero presentó sus propios problemas, lo que la convirtió en una mala opción.

Lipo láser

Finalmente, se desarrolló una tecnología que realmente ayudó: la liposucción láser. Aplicar láser al interior de la piel después de extraer la grasa ayuda a que se contraiga. El problema con la liposucción láser inicial era que era tan efectiva que era difícil de controlar. Demasiado de algo bueno podía ser malo.

Smartlipo MPX y Triplex

Smartlipo MPX representa un gran avance. En primer lugar, MPX significa multiplex. Originalmente dos frecuencias de láser, ahora tres. Esto combina múltiples frecuencias de luz láser que se dirigen mejor a la piel y la grasa. Esto permite que el procedimiento sea más rápido y efectivo. El otro avance fue la termoguía, que mide el efecto en el tejido en la punta de la cánula y puede configurarse para limitar el láser. Cuando se alcanza la temperatura adecuada, la máquina puede apagarse automáticamente. Esto representa un gran avance en seguridad.

El resultado de Smartlipo MPX

Ahora puede lograr más que nunca con este procedimiento mínimamente invasivo. El procedimiento es breve, causa muy pocas molestias y podrá volver a sus actividades habituales en pocos días.

Someterse a una liposucción inteligente

Si desea perder esa grasa que la dieta no puede eliminar, Smartlipo podría ser la solución. El primer paso es una consulta gratuita con el Dr. Studin. Tras analizar sus áreas problemáticas, el Dr. Studin le explicará las opciones disponibles y los resultados que puede esperar. Una vez que se pongan de acuerdo sobre el plan, se programará el procedimiento. Si se someterá a Smartlipo despierto, se reunirá con el Dr. Studin y el personal de enfermería para recibir anestesia oral y local previamente. Si prefiere dormir, un anestesiólogo certificado se reunirá con usted. La anestesia que se utiliza para Smartlipo mientras está dormido es similar a la que se utiliza para la colonoscopia. Su efecto es rápido y el paciente se despierta enseguida. Las náuseas son muy poco frecuentes.

Una vez finalizado el procedimiento, se irá a casa con una prenda compresiva. Esta solo se usa unos días con Smartlipo. Puede presentar algo de moretones, pero es menos probable que con la liposucción tradicional. El dolor casi siempre es mínimo. La mayoría de las personas recuperan prácticamente todo en pocos días.

Los resultados son visibles de inmediato. Te verás más pequeño que antes, ese mismo día. Como con cualquier procedimiento, hay algo de hinchazón, así que a medida que esta desaparece, te verás aún más pequeño. ¡La contracción de la piel puede seguir mejorando con Smartlipo durante más de un año!